lunes, 29 de abril de 2013

Tolerar la frustración


Cuando toleramos la frustración entendemos que las cosas no suceden como esperamos, pero que no por eso nos vamos a rendir, no por eso lo dejaremos de intentar.

Por lo general tendemos a exagerar lo que nos ocurre, sentimos que no podemos, y si bien no podemos evitar sentirnos frustradas, si podemos controlarnos especialmente cuando pensamos a mediano o largo plazo y no en la satisfacción inmediata. Sólo es cuestión de esperar a que pase el malestar y enfocarnos en buscar soluciones.

La tolerancia a la frustración se enseña desde la infancia, desde el momento en que nuestros padres cumplen con todos nuestros caprichos, al punto que creemos que así lo deberían hacer todos o que comenzaremos a ver resultados desde el primer momento. 

Pero tampoco hay que confundir tolerancia a la frustración con la resignación a sufrir, es solo un momento que hay que aguantar, aprender y luego continuar. 

Si no toleramos la frustración, no aprenderemos de nuestros errores, y por lo tanto, es más probable que fracasemos en diferentes proyectos. Sin embargo, la vida nos enseña a tolerar la frustración en muchos casos, cuando sabemos que no nos queda más que continuar. 




lunes, 15 de abril de 2013

HOMBRES "DIFÍCILES"


Muchos dicen que las mujeres son las complicadas, y muchas dicen que los hombres son fáciles, ¡pero no tan rápido!, no siempre conseguimos al que queremos o que pensamos que queremos. ¿Y por qué debería ser así?
Desde los que están todo el tiempo con los amigos, o los que se comportan como niños que aún creen que las mujeres también son niñas y no se toman nada en serio. También el que no busca una relación sino sólo una aventura pasajera, o los que ya consiguieron lo que querían después de disfrazarse de príncipe azul (ya era sospechoso). A muchos hombres les cuesta confiar en las mujeres, sobre todo si tienen que pagar o sólo confían en su madre, sin embargo, hay hombres en los que no se puede confiar, porque son impuntuales, no cumplen lo que prometen. O bien, los hombres inseguros  o tímidos que no dicen lo que sienten.
Creo que es adecuado, tanto para hombre y mujeres buscar el equilibrio, y reconocer que no todos podemos ser iguales que no nos tienen por qué encasillar, pues se supone que generalizar es sólo para saber cómo está el panorama.
Si mostramos que pueden confiar en nosotras, que no coartaremos su libertad y no lo amamos por su dinero o cuerpo. A diferencia de presionarlo o mostrarnos regañonas. Además de mostrarnos seguras y autosuficientes. Y por supuesto, que nos conquisten de igual manera.